Proyectos artísticos fuera de la norma: ahora Wetransfer también ejerce de mecenas

El actor, músico y activista británico Riz Ahmed protagonizó en el año 2020 el cortometraje The Long Goodbye. Una película de 12 minutos inspirada en su último álbum de hip hop que profundiza en la relación (cada vez más tóxica) entre asiáticos y británicos tras el ascenso de la extrema derecha en Gran Bretaña. Esta pequeña obra de arte nunca hubiese existido sin WePresent. La plataforma, que produjo la pieza audiovisual, es el brazo editorial de WeTransfer, el archipopular servicio de transferencia de archivos que se ha convertido en una revolución cultural con cuatro millones de lectores mensuales y lectores en 190 países.

El equipo editorial de WePresent está formado por siete personas y una cuidada red de colaboradores locales en cada rincón del planeta que trabaja para descubrir artistas inusuales y presentar proyectos a través de formatos todavía más inusuales. “La historia es la clave”, comienza vía correo electrónico Holly Fraser, redactora jefa del proyecto. “Buscamos artistas progresistas y pioneros de cualquier disciplina y género, desconocidos o populares, con una narrativa potente, capaces de generar conversación e impactar. Y, a partir de ahí, empezamos a pensar qué podemos crear juntos”, explica.

Ahmed no ejemplifica al artista emergente descubierto por casualidad: estuvo nominado recientemente como Mejor Actor en los Oscar por la película The Sound of Metal. Pero sirve para explicar el modus operandi del equipo: les gustaba su música y le propusieron hacer un corto. WePresent no acepta proyectos ya publicados, sino gente con talento para publicar proyectos inéditos capaces de erizar la piel. Ese es su mantra.

Cada semana estrenan solo tres historias y, hasta el momento, han lanzado más de 1.000 proyectos de 100 nacionalidades. “Nos obsesiona la calidad y nos importa poco la cantidad. Buscamos en galerías, instituciones que representan a talentos emergentes, ferias de arte internacionales y nos perdemos en los rincones más profundos de las redes sociales… Al final, nada de lo que veas en WePresent existirá en otro lugar”, matiza Fraser.

Seleccionado el artista, un equipo formado por escritores, diseñadores e ilustradores busca soluciones gráficas para contar la historia. La web, vinculada a la página principal de WeTransfer, es un festival futurista de tipografías, colores, formatos y propuestas audiovisuales bastante bizarras. “Una de las mejores partes de nuestro trabajo es poder hacer un seguimiento de los artistas y descubrir el impacto que ha tenido en su carrera el hecho de aparecer en WeTransfer”. Durante la pandemia de la covid-19, WePresent donó 500 millones de impresiones de espacio publicitario a artistas con los que habían trabajado anteriormente para impulsar su trabajo y minimizar los efectos de la crisis.

En 2020, durante el confinamiento, el equipo editorial lanzó Literally, una sección de literatura coordinada por la escritora Liv Siddall, que intercala diseño, fotografías y vídeo y que, sin querer, se ha convertido en una editorial digital. Se estrenó con una historia original de Bernardine Evaristo (premio Booker 2019) y, desde entonces, han publicado a Raven Smith, David Sedaris, Kevin Morby, Jarvis Cocker u Oyinkan Braithwaite. Estos son artistas consagrados, como Ahmed, pero todos los relatos son inéditos. A partir de ahora, cuando vayas a enviar un archivo, lo de menos será el archivo.