La peor gota fría del siglo devasta Valencia con víctimas mortales, desaparecidos y pueblos anegados
Numerosas personas siguen pidiendo auxilio desde las redes sociales, atrapadas en sus coches, carreteras, casas y centros de trabajo, tras una noche de pesadilla
La provincia de Valencia despierta tras una noche de pesadilla a la espera de conocer la verdadera magnitud de la devastación del temporal que se cierne sobre ella desde este martes. Hay muchos muertos, de momento 51, personas desaparecidas, conductores aislados, vecinos encaramados en los pisos superiores, miles de personas desplazadas que no pudieron volver anoche a sus casas, coches apilados, pueblos anegados y carreteras cortadas. Los daños son incalculables.
El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, confirmó anoche la recuperación de “cuerpos sin vida”, pero evitó dar un número hasta contactar con los familiares. A primera hora de esta mañana, se han confirmado 13 fallecidos ―cinco en Torrent (un matrimonio, dos niños y un bebé), cuatro en Paiporta (dos hombres, una mujer y un bebé), en Chiva (un hombre), en Cheste (otro varón), Alfafar (una mujer) y en Alcudia (otro hombre)― y sobre las nueve de la mañana, la cifra ha ascendido a 51.
A la luz del día y con el nivel del agua bajando en las comarcas valencianas más afectadas, Utiel-Requena, la Hoya de Buñol l’Horta de Valencia y La Ribera, se espera poder llegar a los lugares donde ayer fue imposible o muy difícil para seguir con la búsqueda de desaparecidos. Por todo ello, es imposible ofrecer un cálculo de personas desaparecidas. La Generalitat acaba de habilitar este número de teléfono solo destinado a informar sobre estas personas no localizadas: 900365112.
La gota fría que sufre la Comunidad Valenciana es la peor de este siglo XXI, con un impacto y registros superiores a la dana de septiembre de 2019 y comparables a los dos grandes temporales de los años ochenta ―el de octubre de 1982, la pantanada de Tous, y el de noviembre de 1987―, según el primer balance ofrecido por la delegación valenciana de Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su perfil de X. Aemet recuerda que la gota fría de 1982, “descargó con intensidad torrencial más al sur de lo que lo que lo ha hecho esta de 2024”. Por su parte, la de noviembre de 1987 “también afectó a la mitad sur de Valencia”. En octubre de 2000 hubo un episodio de lluvias torrenciales, que es el que “más volumen de precipitación acumuló en la comunidad, pero fue una gota fría muy prolongada, de varios días, y menos catastrófica que la de 1982, 1987 y 2024″. Por tanto, ha sido “un temporal histórico, a la altura de los grandes temporales mediterráneos y entre los tres más intensos en la Comunidad Valenciana”.
Las alertas han empezado a sonar este miércoles desde las siete de la mañana, mientras arrecian las críticas en las redes sociales por la falta de previsión y de advertencia a la ciudadanía sobre la violencia del temporal. Aemet elevó el nivel de aviso de naranja a rojo, el máximo, a las 8.00 en el litoral sur de Valencia, donde se habían acumulado ya 90 litros en apenas una hora, informa Victoria Torres. Fue un aviso ya sobrevenido, por fenómenos meteorológicos ya observados, no en previsión. A las diez, Aemet extendió el rojo a buena parte de esta provincia en medio ya de importantes inundaciones. Los avisos rojos estuvieron en vigor hasta las 18.00, salvo el litoral hasta las 00.00.
Sin embargo, Emergencias del 112 envió la primera alerta unos minutos después de las 20.00 del martes. Miles de personas se quedaron atrapadas en las carreteras, en los centros comerciales o en sus trabajos. Fueron muy numerosos los mensajes en redes sociales pidiendo ayuda para la gente aislada ante la imposibilidad de contactar con el 112, por el colapso de llamadas. Pasada la medianoche, Mazón confirmó la existencia de víctimas mortales, aunque adelantó ningún número ni ubicación. También explicó que había zonas cuya situación se desconocía, dado que no se había podido acceder a ellas y tampoco se había podido establecer comunicación con sus alcaldes.
La dana que afectó al interior de la provincia de Valencia este martes por la mañana se tradujo en inundaciones principalmente en la zona de Utiel, al desbordarse el río Magre, y también en localidades como Chiva, donde se han recogido cerca de 500 litros por metro cuadrado, uno de los registros más altos de los últimos 20 años.
Histórico, comparativa de 2 fotos tomadas con 7 horas de diferencia. Crecida espectacular del río Turia a su paso por el cauce nuevo, a la altura del puente de la A3 con la Av. Del Cid. El caudal sobrepasó los 1400 m³/s en La Presa, Manises, alrededor de las 22:00. #tiempoCV pic.twitter.com/2uqNaRhJNa
— Álvaro (@AlvaroOliver25) October 30, 2024
Toda esa agua caída se ha desplazado hacia el sureste durante horas, hacia el litoral, lo que trasladó los problemas de esas comarcas de Requena-Utiel y la Hoya de Buñol a la de La Ribera Alta, una zona en la que no ha llovido demasiado pero que sufre igualmente grandes inundaciones, como la muy poblada y transitada zona metropolitana de Valencia, la capital.
La pedanía de Pinedo, de unos 2.000 habitantes, fue desalojada y otras como Castellar y barrios del sur como Forn d’Alcedo y La Torre sufrieron inundaciones. El desvío en los años 60 del pasado siglo del cauce del Túria el centro de la ciudad, ha podido evitar otra riuà como la de 1957.
Los barrancos desbordados, principalmente el del Poyo, que une a los crecidos ríos Túria y Xúquer, y los puentes arrastrados, como el de Paiporta, han dejado cientos de trabajadores atrapados en sus fábricas, como en el polígono de Ribarroja, otros tantos conductores atascados durante horas en carreteras como la A-3 o la circunvalación de Valencia, la V-30, y un elevado número de personas que tuvieron que refugiarse en alturas, desde techos de edificios a camiones, ante el riesgo de ser arrastrados.
Lo hicieron a la espera de rescates que en muchos casos tardaron horas en llegar. Según explicó Mazón, no por falta de medios, sino por la imposibilidad de actuar. A los bomberos y las policías locales se unieron además efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Ni los cuerpos de seguridad pudieron escapar en algunos casos del agua y en el cuartel de la Guardia Civil de Paiporta estuvieron toda la noche pendiente de dos de sus agentes, desaparecidos en el garaje del cuartel.
Son las 21:53. Estamos aquí los vecinos de las puertas 1, 2,3, 4, 5 y 19. Hay gente en las terraza de los Alfalares y gente pidiendo ayuda en la finca de Consum https://t.co/vI2ZRvgli5
— Rut Moyano (@RutMoyano) October 29, 2024
Los videos de torrentes de agua desplazando coches y también de personas arrastradas corrieron por las aplicaciones de mensajería y por las redes sociales, aunque estas también sirvieron para ayudar a localizar a personas atrapadas y facilitaron así la labor de las fuerzas de seguridad.
En las próximas horas, ya con la luz del sol y en principio con las lluvias más intensas desplazándose hacia el norte, se espera poder hacer balance, primero de víctimas mortales y heridos y después de los ingentes daños materiales que en forma de destrozos y toneladas de barro está dejando a su paso un temporal sin nombre, pero dispuesto a hacer historia.
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